Empresas Premium
Betelgeux-Christeyns lanza su nueva gama de productos desinfectantes basados en ácido peracético (PAA) formada por los productos Betelene para industria alimentaria y Betelgan para uso veterinario. Se trata de excelentes productos antimicrobianos, muy efectivos ante una amplia gama de microorganismos y que tienen múltiples aplicaciones.
El ácido peracético es un antimicrobiano eficaz contra gran cantidad de patógenos bacterianos, hongos, virus y esporas. Es un agente respetuoso con el medio ambiente e inofensivo para la salud, gracias a la inocuidad de sus componentes. Se emplea como desinfectante, blanqueador, coadyuvante tecnológico y en tratamientos de agua, entre otros, tanto en sistemas cerrados como superficies abiertas, aunque especialmente se utiliza para desinfección en industrias alimentarias y explotaciones ganaderas. También se conoce como ácido peroxiacético (CH3CO3H) y también tiene un uso en lavandería industrial y tratamiento de aguas.
En la innovadora gama encontramos productos espumantes y no espumantes, entre los que se encuentran: Betelene OX150, formulación no espumante con un 15% de PAA; Betelene OX50 y Betelgan OX50, no espumantes con un 5% de PAA; Betelene OX50 TS, una versión trazable por conductividad; Betelene OX25 Foam, producto espumante para uso ambiental y en sistemas cerrados con un 2,5% de PAA; Betelgan OX25 Foam, espumante para uso veterinario con un 2,5% de PAA. También contamos con el formato spray listo para su uso ambiental y en sistemas cerrados, Betelene OX Spray. Todos los productos son aplicados a rigurosos procedimientos de control durante todo su proceso productivo para garantizar su máxima calidad y han sido registrados según el Reglamento de Productos Biocidas (Reglamento (UE) nº 528/2012). En Betelgeux-Christeyns desarrollamos protocolos a medida para cada cliente. Nuestro servicio técnico le aconsejará sobre el producto más adecuado para usted y sus condiciones idóneas de aplicación.
Los productos de esta gama presentan eficacia en tiempos de 5 minutos e incluso menos en concentraciones inferiores a 100 ppm y son utilizables en un amplio rango de temperatura, hasta los 60ºC. Además no se ven afectados por residuos de proteínas ni por la dureza del agua. Se pueden usar para desinfectar sistemas cerrados como CIPs, superficies, tanques, rellenadores o pasteurizadores, y también en ambientes con presencia de dióxido de carbono, como tanques de fermentación o carbonatadores.
Los subproductos del ácido peracético, es decir, los componentes que se obtienen tras su descomposición, son agua, oxígeno y ácido acético, productos inofensivos para la salud y para el medio ambiente, ya que son fácilmente solubles en agua. Su capacidad biocida es debida a su gran acción oxidante, que destruye la membrana celular exterior de los microorganismos, provocando su lisis. Transfiere electrones de la forma oxidada del ácido a los microorganismos, lo que provoca su inactivación o su muerte. Se trata de un producto de fácil aplicación, en solución acuosa, que puede ser espumante, ideal para desinfección de superficies, o no espumante, indicado para circuitos y sistemas cerrados. Su coste es relativamente bajo y es por ello que cada vez es más popular como antimicrobiano.
Tanto la EPA (Agencia de Protección Ambiental) en Europa como la FDA (Departamento de Agricultura de los EE.UU) indican que puede usarse como desinfectante en superficies en contacto con alimentos, así como en contacto directo con frutas, vegetales, carnes y mariscos. La Autoridad Europea para la Seguridad de los Alimentos (EFSA) sostiene que el ácido peracético puede resultar efectivo para desinfectar canales de aves sin afectar a la piel o a la carne, aunque por el momento no existe ningún reglamento europeo que permita su uso sobre carne.
