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Es fundamental detectar las zonas que pueden ser más peligrosas (desagües, zonas con acumulación de humedad, juntas, etc.) y tenerlas especialmente en cuenta al desarrollar el plan de higiene.
Uno de los principales focos de contaminación en la industrias alimentaria se encuentra en los suelos de sus instalaciones. Este tipo de superficie constituye un riesgo en cuanto a contaminación cruzada al tratarse frecuentemente de zonas de paso de los operarios o de maquinaria, por lo que es vital detectar las zonas que pueden ser más peligrosas (desagües, zonas con acumulación de humedad, juntas, etc.) y tenerlas especialmente en cuenta al desarrollar el plan de higiene.
Hay que tener presente la gran variedad de suelos que se pueden encontrar en la industria alimentaria. Conocer la tipología y el material utilizado para su construcción es clave a la hora de seleccionar una solución para la limpieza y desinfección de los suelos, además de contar con un análisis del tipo de suciedad que es más propensa a generarse en la superficie. Los materiales seleccionados para los suelos de las industrias deben ser resistentes a los productos químicos que se usan en las industrias y al paso de las carretillas para no agrietarse, como por ejemplo suelos epoxi o plaquetas cerámicas.
En este sentido, la elección de la dosis de uso va a jugar un papel fundamental. Normalmente las soluciones para la limpieza de suelos suelen ser productos alcalinos con una alta eficacia desengrasante y capaces de eliminar tanto suciedad orgánica como inorgánica.
Además de los productos alcalinos, también hay alternativas muy interesantes como puede ser el uso de productos enzimáticos, que combinan tecnología química y biológica que garantizan unos resultados óptimos con un grado de pH prácticamente neutros y, por tanto, son más cuidadosos con las superficies a tratar. Los productos ácidos también son empleados para la limpieza de suelos, concretamente para las limpiezas de restos calcáreos y sales.
Pese a que los suelos no son superficies que vayan a estar en contacto directo con el alimento, no por ello debe reducirse la atención en cuanto a la limpieza y desinfección, puesto que su contaminación supone un punto de partida para los vectores de transmisión en la contaminación cruzada.
Una de las características que deben cumplir los suelos utilizados en las industrias alimentarias es su grado de resistencia a los productos químicos y al paso de carretillas con el fin de evitar que se agrieten. Por este motivo, los principales materiales utilizados suelen ser epoxi y plaquetas cerámicas, entre otros.
Para Cleanity, la limpieza y desinfección de suelos es una de las fases clave a la hora de diseñar un plan de higiene. Para ello, existe la gama de soluciones Cleanity Premium, una serie de productos versátiles que cubren todas las necesidades de la Industria en cuanto a limpieza y desinfección de todas las partes del proceso productivo, entre ellas los suelos.
Normalmente se diferencia entre las soluciones de limpieza y las de desinfección, aunque no siempre se requerirá del paso de la desinfección. Consulta todas las soluciones que ofrece Cleanity para una correcta higiene de suelos en este enlace: www.cleanity.com/soluciones/premium