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La empresa Betelgeux y la Universidad Católica de Valencia (UCV) han suscrito un convenio para la creación de la nueva Cátedra Betelgeux para el Desarrollo de una Economía Sostenible a través de la Innovación y la Promoción del Talento Empresarial, según la propuesta de la encíclica del Papa Francisco, Laudato Si.
El Cardenal Arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares (izda.), y Enrique Orihuel, Consejero Delegado de Betelgeux (dcha.), durante la firma de este convenio.
La Cátedra ha sido promovida desde la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir. Así lo manifestó en el acto de la firma el Gran Canciller de la UCV, Antonio Cañizares, Cardenal Arzobispo de Valencia, quien suscribió el viernes pasado el acuerdo junto con el Consejero Delegado de Betelgeux, Enrique Orihuel. El acto, que tuvo lugar en el Salón Gótico del Palacio Arzobispal de Valencia, contó con la presencia del Delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, el Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UCV, Juan Sapena, el vicerrector para la Investigación y Docencia de la UCV, Ginés Marco, el vicerrector de Pastoral y de la Evangelización y Capellán Mayor de la UCV, José Luis Sánchez, además de investigadores en el ámbito de la economía de la empresa, empresarios, profesores, políticos, sacerdotes y profesionales de la vida económica.
El Cardenal Antonio Cañizares destacó en el acto que “la economía ha de centrase en la persona y estar al servicio de la persona. Cuando se olvida esto se deshumaniza la sociedad. El bien común pasa necesariamente por cada una de las personas y esto es lo que ilumina y busca esta Cátedra, que ha de ser un estímulo para toda la universidad”, subrayó Cañizares.
En este sentido, el cardenal valenciano se refirió también a la nueva titulación que está proyectando la UCV, Ciencias del Desarrollo, que, como la nueva Cátedra, tiene que ver con el desarrollo humano. “Por eso me alegro de este convenio, que se firma sobre las bases de la encíclica de Laudato si, que no ha sido comprendida todavía, ni asimilada ni integrada, pero que está llamada a producir una revolución social”, apuntaba Cañizares.
El Consejero Delegado de Betelgeux, Enrique Orihuel, destacó que para para la empresa es un orgullo poder firmar ese convenio que ayudará a buscar nuevos modelos de desarrollo económico sostenible. “La Cátedra se orienta hacia el aumento del bienestar, la reducción de la pobreza y hace un progreso sostenible que no comprometa las posibilidades de las generaciones futuras. Unos objetivos que están en línea de la encíclica Laudato si”, argumentaba Orihuel,
Por su parte, el Delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, afirmaba que “este convenio une dos mundos que siempre han de ir de la mano, la empresa y las universidad, pues la primera ha de acercarse donde está la investigación. La unión nos hace más fuertes y cada uno, desde su casa, debemos construir una sociedad donde impere el progreso, el bienestar, los valores y la ética”.
El Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UCV, Juan Sapena, destacó en su intervención la relevancia de la Cátedra Betelgeux, cuyo “eje vertebrador es la dinamización de la actividad investigadora en el ámbito de una economía al servicio de la persona y su desarrollo integral”. Para ello, “estará orientada a la investigación de materias tales como la economía circular y modelos económicos sostenibles en función del bien común”, añadió Sapena.
Betelgeux, a través de este convenio, pone en valor una de sus líneas de trabajo como es el compartir el conocimiento. Cabe recordar que en diez años, la empresa ha formado a más de 60.000 alumnos en distintas materias sobre seguridad alimentaria. Ahora, con esta nueva Cátedra, Betelgeux participará en un nuevo foro de conocimiento en el que tendrá la oportunidad de compartir el know-how adquirido durante todos estos años, para poder así contribuir a hacer un mundo mejor.
