Un Robot Móvil Autónomo y un Vehículo Guiado Tradicional. ¿Cuál es la diferencia para la industria?

La automatización de la logística interna en una fábrica del sector de la alimentación es un problema recurrente tanto para grandes como para medianas empresas. ¿Por qué utilizar los recursos de los empleados para mover los materiales cuando se pueden automatizar estas tareas con robots móviles autónomos colaborativos que ofrece la industria 4.0 y hacer que los empleados se centren en actividades de mayor valor? 

La automatización de la logística interna en una fábrica es un problema recurrente tanto para grandes como para medianas empresas. ¿Por qué utilizar los recursos de los empleados para mover los materiales cuando se pueden automatizar estas tareas con robots móviles autónomos colaborativos que ofrece la industria 4.0 y hacer que los empleados se centren en actividades de mayor valor? 

Para reducir los cuellos de botella de producción y disponer de una mayor eficacia en la planta de producción, la solución viene por automatizar el transporte de materiales en las fábricas, así las organizaciones pueden optimizar la productividad y programar entregas de manera más efectiva.

Hasta hace poco, los vehículos guiados automáticos tradicionales eran la única opción para automatizar las tareas de transporte interno. Estos son un accesorio muy familiar en instalaciones grandes y fijas donde existe la necesidad de entregas de material repetitivas y consistentes, y donde se pueden tolerar grandes desembolsos de costes iniciales y un largo retorno de la inversión. 

Hoy, sin embargo, estos vehículos están siendo desafiados por la tecnología más sofisticada, flexible y rentable de los robots móviles autónomos. Tanto éstos como los vehículos guiados mueven materiales de un lugar a otro, sin embargo, ahí es donde acaban las similitudes.

Rutas fijas vs. navegación inteligente

Un vehículo guiado tradicional (VGT) tiene una inteligencia mínima incorporada y solo puede obedecer instrucciones de programación simples. Por no añadir que para navegar debe guiarse por cables, bandas magnéticas o sensores, que generalmente requieren la instalación de actualizaciones de instalaciones costosas y extensas durante las cuales puede interrumpirse la producción. Por lo que está restringido a rutas fijas que requieren un coste adicional y una interrupción si se necesitan cambios en el futuro. Es cierto que puede detectar obstáculos en frente de él, pero no puede navegar a su alrededor, por lo que simplemente se detiene en seco hasta que se elimina el obstáculo.

En contraste, el Robot Móvil Autónomo navega a través de mapas que su software construye en el lugar o mediante dibujos de instalaciones precargadas. Inlcuso recientemente se han desarrollado capacidades de Inteligencia Artificial que llevan la robótica móvil a un nuevo nivel mejorando la navegación y optimizando la planificación, que le permiten funcionar de manera totalmente autónoma. Es decir, la capacidad de distinguir entre humanos, carretillas elevadoras y otros obstáculos y reaccionar lo hace extremadamente eficiente.

Con estas capacidades de inteligencia artificial incorporadas en el sofisticado software y sus cámaras estratégicamente ubicadas que funcionan como un conjunto extendido de sensores robóticos, los robot móviles autónomos de MiR optimizan la planificación de rutas y el comportamiento de conducción. Las cámaras -denominadas MiR AI Camera- permiten a los robots detectar y reconocer diferentes obstáculos en movimiento y reaccionar en consecuencia. 

Por ejemplo, si el robot detecta a una persona, estacionará para  a continuación seguir con su ruta, sin embargo, si detecta un vehículo guiado autónomo tradicional le cederá el paso para que éste pueda pasar. El robot también puede predecir de antemano las zonas bloqueadas o con mucho tráfico y redirigir la ruta en lugar de entrar en la zona bloqueada y desviarla y utilizar la mejor ruta alternativa. Esto optimiza la productividad al asegurar que el flujo de materiales se mantenga dentro del cronograma. 

Alta flexibilidad

Esta operación autónoma también hace que un Robot Móvil Autónomo sea mucho más flexible que un vehículo guiado tradicional, ya que, estos se limitan a seguir una ruta estricta que está integrada en la instalación, generalmente instalada en el suelo de la fábrica. Eso significa que las aplicaciones son limitadas y realiza la misma tarea de entrega a lo largo de su vida útil, ya que, los cambios simplemente resultan demasiado caros y perjudiciales para ser rentables.

Sin embargo, el Robot Móvil Autónomo sólo necesita simples ajustes de software para cambiar sus misiones, por lo que el mismo robot puede realizar una gran variedad de tareas diferentes en diferentes ubicaciones, haciendo ajustes automáticamente para adaptarse a los entornos cambiantes y los requisitos de producción. 

Las tareas de este robot autónomo colaborativo se pueden controlar a través de la interfaz del robot o configuradas por el software de control de flotas para múltiples robots que priorizan automáticamente los pedidos y el robot más adecuado para una tarea determinada en función de la posición y la disponibilidad. Una vez que se establece una misión, los empleados no tienen que perder tiempo coordinando el trabajo de los robots, lo que les permite centrarse en el trabajo de alto valor que contribuye al éxito de la empresa.

La flexibilidad de los Robots Móviles Autónomos es crucial para los entornos de fabricación modernos que requieren agilidad y flexibilidad si es necesario realizar modificaciones en los productos o en la línea de producción. Altamente adaptables para una producción ágil en instalaciones de cualquier tamaño. Si las celdas de producción se mueven o se agregan nuevas celdas o procesos, se puede cargar rápida y fácilmente un nuevo mapa del edificio o puede volver a mapear en el sitio, por lo que se puede usar inmediatamente para nuevas tareas. 

Esta capacidad proporciona a las organizaciones la plena propiedad del robot colaborativo y sus funciones. Ya que, en lugar de estar limitados por una infraestructura de vehículo guiado tradicional inflexible, los propietarios pueden volver a implementar fácilmente el robot a medida que evolucionan sus necesidades comerciales para ayudarlos a optimizar la producción incluso en entornos altamente dinámicos.

Rentabilidad robótica

Aunque un Robot Móvil Autónomo consiste en una tecnología mucho más avanzada que un vehículo guiado tradicional, generalmente es una solución menos costosa. El Robot Móvil Autónomo no necesita cables, bandas magnéticas ni otras modificaciones costosas en la infraestructura del edificio, por lo que su instalación es más rápida y menos costosa  que -a su vez- permiten prescindir de costosas interrupciones en la producción del proceso. 

Los robots móviles autónomos al ser, colaborativos, rápidos y fáciles de integrar en las líneas de producción junto con el hecho de que las empresas no necesiten realizar cambios en el diseño de sus fábricas cuando integran los robots les facilita el disponer de bajos costes iniciales. Además del hecho de que pueden funcionar durante 12-15 horas sin interrupciones. Por otro lado, se cargan automáticamente cuando no tienen tareas que realizar, lo que garantiza un flujo de trabajo fluido y optimiza la logística interna. 

Debido a esta fácil integración, el retorno de la inversión suele ser inferior a un año ya que un robot generalmente -dependiendo de la aplicación- libera a dos empleados de tiempo completo para realizar tareas de mayor valor.

A medida que crecen las empresas, la implementación de estos Robots Móviles Autónomos puede expandirse simultáneamente con costes adicionales mínimos. En algún momento, todas las empresas deberán preguntarse a sí mismas: ¿podemos permitirnos no utilizar robots móviles autónomos?

Lo cierto es que los entornos de fabricación modernos ya no pueden depender de tecnologías heredadas costosas e inflexibles. Tampoco pueden permitirse continuar el transporte manual improductivo de materiales, especialmente en el apretado mercado laboral actual. Esto, unido a que los robots móviles autónomos son superiores a los vehículos guiados tradicionales en términos de flexibilidad, rentabilidad, retorno de la inversión y optimización de la productividad. 

Actualmente, observamos una clara tendencia en la que las grandes corporaciones multinacionales han comenzado a desplegar más y más robots móviles colaborativos en sus instalaciones en todo el mundo. Muchos todavía están probando diferentes aplicaciones, y a menudo cuantos más robots consiguen en una instalación, más aplicaciones nuevas descubren.